Huir a veces es la mejor solución, dejar pendiente al corazón.
A veces el silencio es la mayor expresión, y la
ausencia es sólo lo quiere el corazón
¿Podrías besarme hasta la
eternidad?
¿En mis días grises,
cuando el sol desaparezca?
¿Podrías ser tú la
estrella o mi sol en el invierno?
Y si los párpados me
pesan, los cerraré con la confianza que al abrirlos tu estarás, ¿Podrías? . . .
¿Y cuando los miedos me
ganen, tú los graduarás?
Recuerdas cuándo tus manos
sujetaban mi cintura, cuándo tus brazos se envolvían en todo mi ser. ¿Recuerdas
cuándo nuestras mentes se pertenecían?
Recuerdo cada palabra,
cada aliento, cada destello y cada explosión.
Cuando
se crea una barrera, no sólo se huye del demás, también huyen las voces del
alma.
Él no desea sonreír, él no
se volvió duro ni extraño con la vida, él sólo tomó la decisión de ser mas
cuidadoso, aunque las personas dijeran que él perdió el corazón y la sonrisa,
que perdió la ternura y el don.
.
. . Él había perdido al alma, de la misma
forma en la que perdió las esperanzas.
SIMPLE
CARNE HUMANA, HUESPED
Tal
vez por la noche. . .
Cierro
los ojos, cuento 5 segundos, los vuelvo abrir, nada cambió. . .
Los
puntos suspensivos parece que se detuvieron, ya no siguieron, tal vez por falta
de fuerza en la mano derecha para dibujarlos, o tal vez porque ya no exista
tinta en el lapicero.
Las
plumas se dejaron de usar, del mismo modo en el que las personas dejaron de
creer en el amor. Las plumas fueron sustituidas por lapiceros, algo mas
práctico, el amor fue sustituido por noches carnales y de impulsos.
Aún veo las mismas estrellas desde que era niño, recostado sobre el césped, con
los brazos extendidos de forma recta, con el humo del cigarrillo de mi padre
sentado junto a mí.
La soledad
siempre fue parte de mí: Inquilino
permanente del corazón.
AUTODESCRIPCION:
Te
prefiero lleno de dudas, ilógico.
Tu
rostro confundido en la expresión más significativa de lo incierto.
Dudoso
del qué pasará pero con agallas para remediar todo si pasará algo malo.
No existen cuerdas
que aten al corazón, sólo cadenas que son arrastradas por el orgullo.
¿Podríamos
creer en el amor sin ver las grietas?
Sólo
me quiero perder, entre tus brazos, en tus labios, poco a poco pertenecer a algo
en ti, sin que te des cuenta seré la estrella que siempre miras y no sabrás qué
hay detrás de ella.
Sentir
tus besos estallar....
Enciende
el auto, conduzcamos hacia la carretera, son la 1:44 am, qué importa,
encendamos la música, ten de mi cuerpo la expresión del amor y encontrar en la
desnudez, la tranquilidad, el silencio del aliento sobre la nuca. Los brazos
sujetos sobre la cintura
-No sé si el dolor sea grande, pero estoy
dispuesto a asumirlo por ti.
-Las cosas no son tan fáciles como el subconsciente te las hace creer.
. . . Fingimos ser
guerreros, cuando somos unos soldados moribundos por dentro.
Ha
sido una noche fuerte, una noche en dónde estalló el lado mas espiritual y se
estrelló junto a los huesos, envolviéndose en ellos.
Había dejado al
corazón pendiente por muchos meses, había decidido caminar con los ojos vendados, no mirar, no lastimar,
sólo percibir y tropezar. En la ceguera encontré mis miedos, hui hacía el vacío. Danza Oscura. No quería marcharme de allí, el cansancio no
daba esperanza al esfuerzo.
Me entregué a mis
miedos, a mi dolor, a mi alma perdida.
No importa cuánto me
lastime o cuánto las piernas se cansen, sólo quiero volver a sentirme vivo.
Encontré en mi
cuerpo la paz, mallas negras y balerinas. Mis piernas no querían detenerse, las
heridas eran parte de mi cuerpo… y mi cuerpo era parte de mi mente.
Somos
parte del tiempo, del mismo modo, en el que somos partículas diminutas para el
espacio, la galaxia, el universo.
Huir a veces es la mejor solución, dejar
pendiente al corazón.
A veces el silencio es la mayor expresión, y la
ausencia es sólo lo quiere el corazón.
Dejé
en el cajón derecho del escritorio mis miedos, desde entonces, todas las noches
llevo una capucha negra para ocultar los ojos húmedos de las críticas de las
personas, ¿Qué saben ellos de un alma perdida? Qué sabemos nosotros del
universo, si aún lo desconocemos. Qué saben ellos de las grietas del corazón. .
.
Él
llevaba una ballerinas y mallas negras, ocultaba la desnudez bajo un abrigo,
sus panties negras eran transparentes, su mirada parecía perdida entre las
luces del alumbrado público. “Ese chico está fuera de este mundo” y tal parece que los
audífonos lo ayudan mucho.
El
alma caminaba por cuerdas tensionadas, a pasos lentos, inseguro, en cualquier
momento lo perdería, el equilibrio parecía quebrantarse. . . Los dos sabíamos
que esta vez no existían trampolines de ayuda, esta vez existía pavimento:
Estrellarse con la realidad.
A
veces cuando la ilusión tiene una grieta, pareciese como si es que pronto se
reparará, pero con el tiempo estas crecen, y las roturas se vuelven
desperfectos, en un vistazo hacia la realidad.
Y cuando pensé que lo había
perdido todo, simple carne humana, mis ideales salieron al frente.
DANZA
OSCURA BAJO LA LLUVIA.
Músculos comprimidos, neuronas extintas, pedazos de
ilusiones. . .
El
amor se envuelve en cada movimiento. El abdomen firmemente duro, no existe ni
un pensamiento en mente, se percibe el vacío, tal vez el ballet es lo más
cercano a la conexión con el alma, no peso nada, pero en la gravedad se hace
sentir el cansancio.
Llegó
el momento en el que la carne humana deja de ser una pieza sexual para
convertirse en un instrumento de arte. Me dejé envolver en lo estético de la
naturaleza.
Soy el pincel de un cuadro,
el arte del amor, la expresión del alma, el encuentro entre el humano, la mente
y la naturaleza. No pararé en mi ballet, no dejaré los sueños, no seré un
vagabundo sin alma. ¡Ya la encontré!
“A veces pensamos que la mejor solución es atar
al alma en cadenas de hierro; sin embargo, es reconfortante cuando el alma
regresa de manera inesperada”
Vivimos pensando que la melancolía y la soledad es un
estado deprimente, del cual nadie quisiera someterse, pero no es así. Bajo
estos sentimientos se puede encontrar a uno mismo, pensar en cosas de las que
jamás has detenido a analizar, tu alma y corazón te lo agradecerá
¡Melancólicamente feliz!
Aprendamos
a escuchar el cantar de los pájaros en esta ciudad caótica.
La
vida esconde su magia en las cosas diminutas, aprendamos a observar.